Tulum.- Hoy dieron inicio dos mega fiestas “rave” de música electrónica en el Parque Nacional Tulum, actividad incompatible con este santuario natural y que, además dan mala imagen al destino al prolongarse hasta la mañana los excesos de alcohol y hasta drogas, denunció el ecologista Gabriel Sifri Jiménez.
Desde temprana hora, en ambos lugares se montaron carpas, pérgola, sillas y los equipos de luz y sonido, en preparación para los días de actividad.
Los eventos tienen capacidad para mil 500 y dos mil personas, al interior de esta área natural protegida, decretada como de máxima protección por ser zona de anidación de tortuas; además de ser parte de la Zona de Amortiguamiento de Monumentos Arqueológicos Tulum-Tankah.
Los dos festivales tienen una duración proyectada de cinco días de música sin parar, en el Club Boa y un predio particular, con miles bebiendo, comiendo y durmiendo en el lugar.
Este tipo de fiestas se pusieron al centro de la polémica derivado de la muerte de un turista en días pasados durante un evento en el cenote Zamná, incidente que el municipio alegó fue un hecho aislado.
Sin embargo, en diciembre la Dirección de Turismo decretó una prohibición de estos eventos en la zona costera, lo que incluiría al Parque Nacional Tulum, zona que se supone es de conservación y cuyas actividades debiera regular la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
Eso no impide que el hotel Papaya Playa Project efectúe estos “raves” durante todo el mes, lo que ha generado inconformidad entre los hoteleros, que se quejan de las largas filas de vehículos indebidamente estacionados sobre la carretera y el peligro que suponen los turistas intoxicados que aparecen sobre la vía asfáltica por la mañana.
La prohibición de este tipo de festivales en Solidaridad, derivado de una balacera en el BPM, hizo que emigraran a Tulum.